Inició proceso de transición presidencial en Brasil

 

La reunión también giró en torno a las garantías de gobernabilidad y compromiso de cooperación por parte de Bolsonaro.

Redacción: Enfoques | @_Enfoques_

Representantes del recién electo presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y del mandatario saliente, Jair Bolsonaro, se reunieron por primera vez este jueves para iniciar el proceso de transición del gobierno en la nación suramericana, en medio de una semana de manifestaciones por la derrota bolsonarista, destacó la Agencia de Noticias Fuser News.

El equipo de “Lula”, encabezado por el vicepresidente electo, Geraldo Alckmin, llegó a Brasilia al final de la tarde de este jueves para acordar los criterios de la toma de posesión y también garantizar la gobernabilidad con un Legislativo potencialmente polémico y asegurarse de que la Administración de Bolsonaro cooperará en la transición.

Luego de la jornada electoral del pasado domingo, se conoció a través de las plataformas digitales y medios internacionales, el bloqueo de las principales vías en diferentes ciudades como medida de saboteo a la elección del líder del Partido de los Trabajadores (PT), quien asumirá la presidencia el 1 de enero de 2023.

El presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE), Alexandre de Moraes, afirmó que quienes no acepten el resultado electoral serán considerados criminales.

Por su parte, el presidente ultraderechista, Bolsonaro, solicitó este miércoles el cese de la ola de violencia convocada por sus simpatizantes, sin embargo, aún se mantienen algunos focos de protestas y los bloqueos en las carreteras pierden fuerza, en momentos en que inicia la transición oficial de Gobierno.

Elección

El TSE informó este domingo a través de su cuenta en Twitter que «a las 19:56 horas el candidato Lula (PT) es elegido matemáticamente a la presidencia de la República con el 50,83% de los votos», mientras que Jair Bolsonaro (PL) obtuvo 49,17%.

El líder del PT viene de la génesis sindicalista del gigante suramericano, además, es uno de los grandes representantes de la izquierda en América Latina, mientras que Bolsonaro es un exmilitar que no logró la reeleción presidencial con una campaña de los valores ultraconservadores de derecha, tras fuertes denuncias por mal manejo sanitario durante la pandemia por Covid-19 en Brasil, además de otros escándalos relacionados sobre la gestión en el país.