Cyril Ramaphosa se juramenta presidente de Sudáfrica

Ramaphosa indicó que «es un momento en el que debemos elegir entre avanzar juntos o arriesgarnos a perder todo lo que hemos construido».

Cyril Ramaphosa juró este miércoles para un segundo mandato consecutivo al frente de la Presidencia de Sudáfrica, el país más industrializado del continente, luego que su partido, Congreso Nacional Africano (ANC), negociara un acuerdo con otras fuerzas políticas.

«La formación de un Gobierno de unidad nacional es un momento de profunda importancia. Es el comienzo de una nueva era«, dijo durante su discurso ante el jefe del Poder Judicial sudafricano, el magistrado Raymond Zondo, informó Fuser News.

“Juro que seré fiel a la República de Sudáfrica y obedeceré, observaré y mantendré la Constitución y todas las otras leyes de la República”, declaró además en la ceremonia solemne, en la que quedó investido para un nuevo mandato de cinco años, siendo el quinto presidente de la historia democrática de su país.

Además, Ramaphosa, de 71 años, indicó que «es un momento en el que debemos elegir entre avanzar juntos o arriesgarnos a perder todo lo que hemos construido».

La ceremonia tuvo lugar en los Union Buildings, sede del Ejecutivo sudafricano en Pretoria, días después de una maratoniana primera sesión de la Asamblea Nacional (Cámara baja del Parlamento) el pasado viernes, en la que el dirigente político resultó elegido como presidente por 283 votos.

Al acto asistieron casi 20 jefes de Estado y de Gobierno. Entre los países representados están China, Egipto, Cuba, Zimbabue, Angola y el Estado de Palestina.

Horas antes, John Steenhuisen, líder de la Alianza Democrática (AD), hasta ahora primera fuerza de la oposición, anunció el acuerdo con el CNA para formar un «Gobierno de unidad nacional (GUN)».

El lunes, el CNA confirmó que otras tres fuerzas políticas aceptaron unirse también a la alianza: el Partido de la Libertad Inkatha (IFP), GOOD y Alianza Patriótica (AP).

En las elecciones del pasado 29 de mayo, el CNA obtuvo un 40,18% de los votos, que se traducen en 159 de los 400 escaños de la Asamblea Nacional, perdiendo la mayoría absoluta que había ocupado desde la instauración de la democracia y el fin del sistema racista del ‘apartheid’ en 1994.