La ultraderecha está aprovechando la muerte de tres niñas a manos de un joven de 17 años y de familia ruandesa, para atacar mezquitas en Manchester, Liverpool y Londres.
El apuñalamiento de tres niñas en el noroeste de Inglaterra ha desatado una ola de “islamofobia” en Reino Unido, en medio de noticias falsas y de llamados de la extrema derecha a ganar las calles para “protegerse” de musulmanes y solicitantes de asilo, representando una amenaza para el primer ministro laborista Keir Starmer, según el portal de noticias Fuser News.
La ultraderecha está aprovechando la muerte de tres niñas de 4,7 y 9 años en Southport a manos de un joven de 17 años nacido en Gales y de familia ruandesa, para atacar mezquitas y ocasionar disturbios en Manchester, Liverpool y Londres. Tres pequeños fueron dados de alta y cinco están en estado crítico.
El uso de las redes sociales y la inteligencia artificial potenciaron las escenas del caos de los últimos dos días y alimentaron el llamado a nuevas manifestaciones para “proteger a nuestros hijos” de musulmanes y solicitantes de asilo.
Aunque el martes la policía aclaró que no se trataba de un atentado terrorista sino de un brote psicótico, en todo el país circularon imágenes trucadas de protestas en todo el país y canciones como la “Southport Saga” que alentaban a “cazar como sea a los culpables».
https://twitter.com/BigBrotherWatch/status/1819040739659034744
El acusado
El presunto autor del ataque fue identificado como Axel Muganwa Rudakubana, de 17 años, quien fue acusado de asesinato, intento de homicidio y posesión de un arma blanca.
Rudakubana nació en Gales y es parte de una familia de inmigrantes de Ruanda que se mudaron a la zona de Southport en 2013, cuando él tenía 7 años. En cuanto a la motivación, la policía está tratando el caso como un brote psicótico o profundo desequilibrio mental que condujo a la tragedia.
El hecho de que por ley no se pudiera dar a conocer su nombre por ser menor de edad hasta que fuera formalmente acusado por la justicia, sirvió para la ola de rumores y la proliferación de teorías conspirativas contra el gobierno laborista.
La ultraderecha parlamentaria de Nigel Farage, que tiene cuatro diputados en la Cámara, se montó rápidamente a los reclamos condenando al gobierno por su política inmigratoria y su intento de encubrir la identidad del atacante.
https://twitter.com/Nigel_Farage/status/1819101701975978170
Starmer no condenó las declaraciones de Farage, pero instó a la calma y condenó los desmanes de la ultraderecha.
Entretanto, la comunidad musulmana pidió al gobierno y la policía protección ante la violencia de las amenazas y las protestas callejeras. En Southport y Hartepool hubo ataques contra mezquitas. En Manchester y Aldershot en Hampshire los dardos se dirigieron contra centros de alojamiento de solicitantes de asilo con pancartas que pedían su deportación inmediata.
Comunicador popular, bloguero y Activista Revolucionario. Escribo para @aporrea y @ensartaos