Para hacer frente a la situación la Cancillería solicitó ayuda para controlar el fuego a los Gobiernos de Perú e Italia.
El Gobierno de Ecuador declaró una emergencia nacional por 60 días debido al déficit hídrico, la sequía y los incendios forestales que consumieron en los últimos días más de 10 mil hectáreas en el sur del país, informó este lunes la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR).
En un comunicado la cartera informó que la ministra Inés Manzano, presidenta del Comité de Operaciones de Emergencia (COE), confirmó la medida, “debido a la magnitud y el impacto de los eventos registrados”, señala Fuser News
Actualmente, se registran 17 incendios activos y cinco controlados a nivel nacional, con un impacto mayor en las provincias de Azuay y Loja (sur), informó el ente. Para hacer frente a la situación la Cancillería solicitó ayuda para controlar el fuego a los Gobiernos de Perú e Italia que apoyarán con recursos aéreos.
La crisis hídrica ha provocado apagones de hasta 14 horas diarias, mientras el Gobierno atribuye la situación a la peor sequía que afronta el país, que ha ocasionado el bajo caudal en las hidroeléctricas, aunque también se suma la falta de mantenimiento de las centrales y de inversión en el sector, así como a la corrupción.
En un comunicado la cartera informó que la ministra Inés Manzano, presidenta del Comité de Operaciones de Emergencia (COE), confirmó la medida, “debido a la magnitud y el impacto de los eventos registrados”, señala Fuser News
Actualmente, se registran 17 incendios activos y cinco controlados a nivel nacional, con un impacto mayor en las provincias de Azuay y Loja (sur), informó el ente. Para hacer frente a la situación la Cancillería solicitó ayuda para controlar el fuego a los Gobiernos de Perú e Italia que apoyarán con recursos aéreos.
La crisis hídrica ha provocado apagones de hasta 14 horas diarias, mientras el Gobierno atribuye la situación a la peor sequía que afronta el país, que ha ocasionado el bajo caudal en las hidroeléctricas, aunque también se suma la falta de mantenimiento de las centrales y de inversión en el sector, así como a la corrupción.